Aguanta dulce y rebelde Yuli

Aguanta dulce y rebelde Yuli
Te estoy escuchando:
Tu marido es muy joven
Tus hijos tan pequeños.
A él le gusta andar con sus amigos
En todo su tiempo libre,
Y vuelve a cualquier hora
Para caer desmayado sobre la cama.
Y vos estás cansada,
Tu yo se siente muy ignorado.

¿Viste? De nada te sirvió
la cabeza rapada,
Los tatuajes y piercings...
¿De qué te protegieron?
Te cuento mi experiencia
Con el amor de mis amores:
Tuve extrañas sensaciones
Ante tantas ausencias
Y justificaciones permanentes
¿Dadas por él? pensadas por mí...
Dudas mordientes
Que no me dejaban vivir
en tantas soledades y penas…
Culpa del Romanticismo Heredado
de las novelas rosadas.
de los amores platónicos
de las superstares, lánguidas y enamoradas,
aquellas del cine musical Hollywodense,
con tantos films de final feliz.

Amor de mis amores
Que diferente era…
Con el pasar del tiempo,
Costó dejar los ísmos.
Los enamoradismos
Del amor en sí mismo
Crecidos y fallecidos
en mi mente tierna,
Para encontrar la esencia,
Lo simple, lo habitual,
Lo que prevalece
Y queda…
Lo noble y cotidiano,
El esfuerzo, la paciencia eterna,
El acompañamiento callado
O inaguantablemente reprochón,
Por las acciones esas de los hombres
Que cuesta insertar en la lógica femenina.
Amor de mis amores
Él de mí no tuvo engaños
Ni infidelidades.
Sólo para él,
Única para él.
En el cuerpo y en el alma,
En la pena,
En la alegría,
En la fricción del pensamiento,
En el roce de las ideas no compartidas,
O lo que es peor, ignoradas.
Aún así, todo tiempo mejor llega.
Solo hay que tener entereza,
Un aguante infinito…
La corteza crece sobre el alma
Y ahí va anidando la alegría
Protegida por el esfuerzo permanente
A través de los años que pasan.
Aguanta dulce y rebelde Yuli.
Te cuento que hoy
Ya es un buen tiempo para mí
¿Viste? Todo llega…