Por la noche
cuando duermes
escarbo tu alma con mis dedos filosos
para que germine tu ángel negro.
Él sale pronto
desenroscándose
como un brote alado
que toma con fuerza mi cintura.
Volamos juntos
hacia las terrazas viejas
sobre los edificios
enladrillados
en un abrazo aéreo…
Miramos
la ciudad dormida en eternidades
desde las cúspides
desde los techos grises
entre despojos de veletas opacas
y acumulaciones de antenas metálicas.
Juntos volamos…
Tu ángel negro y yo
ladrona de ángeles caprichosos y proféticos
ocultos en la profundidad de los corazones.
Cuando flotamos ensamblados
en lo alto
lejos de las miserias terrenas
rescato significados olvidados
y borro negaciones enraizadas.
En ese lugar etéreamente extraño
doy a luz un aire de ternuras
que cicatriza mi alma
y la florece en alegrías
mientras tu ángel
oscuro y callado
me acompaña en secreto.
Dea Bea
Antología Fulguraciones
IV
Villa Gral Belgrano
2011
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