Zona inesperada

¡Qué es esto donde ya no soy?
Ha desaparecido el jardín,
las esperanzas, los proyectos,
la casa y los temores,
las equivocaciones y los aciertos,
la vida en manada,
el cariño, la compañía...
¿Dónde está la circularidad
de los tiempos cotidianos?
¿Dónde la repetición infinita
de los actos mínimos y aburridos?
¿Dónde están los seres míos?
¿Dónde los objetos, lo hecho y lo imaginado?
Portales largos y estrechos
donde no hay nada,
nada más que nada.

"Está"

En los filtros terrosos
de la tarde
está lo que buscas.
Y está, también,
en tu mirada firme.

Dentro del sol sujeto
a las hojas recién llovidas.
Sobre la mesa, a tu lado,
en la otra página del libro
que no necesitas leer...

Metido en la cama,
tímidamente,
entre las sábanas limpias.

En el hilo
del botón
recién cosido
de tu camisa.

Asomada a la sonrisa
de tus hijas.

En el sendero perfumado
de la sierra

Justo ahí,
donde no se te ocurrirá
buscar...

Pero está.

Los casi muertos

Los he escuchado hablar
mientras sentada en los pasillos
esperaba desenlaces...



Escuché
cuando los casi muertos
hablaban apenas
sin fuerzas
moviendo
sus labios lívidos,
sin sangre.
las cabezas cerúleas,
los ojos de negro absoluto,
las miradas surgentes
de oscuridades profundas.
Los escuché hablar,
en tanto se me adormecía el alma
apretada por el dolor.
Y yo esperaba
siempre esperaba en los pasillos.